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Los efectos en la salud de la iluminación LED

Efectos en la salud de la luz LED

Hoy vamos a hablar sobre los efectos en la salud de las luces LED. ¿Es oro todo lo que reluce? ¿Son peligrosas? ¿Hasta que punto pueden afectarnos? ¿Pueden causarnos cáncer? Vamos a dar respuesta a esas preguntas.


La iluminación LED (diodo emisor de luz) parece ser la ola del futuro, y ya del presente, dado el contenido de mercurio y los problemas de calidad de la luz con la actual serie de bombillas verdes, la fluorescente compacta (CFL). Los LED utilizan significativamente menos energía que las CFL, y no contienen mercurio. Y se están convirtiendo en competitivos económicamente con las CFL en el punto de compra, a la vez que generan ahorros de alta calidad en la iluminación y la factura energética.

¿Son los leds peligrosos para la Salud?

Pero los LED tienen un lado oscuro. Un estudio publicado a fines de 2010 en la revista Environmental Science and Technology encontró que los LED contienen plomo, arsénico y una docena de otras sustancias potencialmente peligrosas.

Los LED se promocionan como la próxima generación de iluminación dice Oladele Ogunseitan, una de las investigadoras detrás del estudio y presidenta del Departamento de Prevención de Enfermedades y Salud de la Población de la Universidad de California (UC). “Pero mientras intentamos encontrar mejores productos que no agoten los recursos energéticos ni contribuyan al calentamiento global, debemos estar atentos a los peligros de toxicidad …”.

Ogunseitan y otros investigadores de UC-Irvine probaron varios tipos de LED, incluidos los utilizados como luces de Navidad, semáforos, faros de automóviles y luces de freno. ¿Qué encontraron?

Algunos de los peores infractores fueron LED rojos de baja intensidad, que se encontró que contenían hasta ocho veces la cantidad de plomo, una neurotoxina conocida, permitida por la ley del estado de California y que, según los investigadores, “muestran un potencial significativo de cáncer y no canceroso”.

”Mientras tanto, los LED blancos contienen menos plomo, pero aún albergan grandes cantidades de níquel, otro metal pesado que causa reacciones alérgicas en uno de cada cinco de nosotros al momento de la exposición. Y el cobre que se encuentra en algunos LED puede representar una amenaza para el medio ambiente si se acumula en los ríos y lagos donde puede envenenar la vida acuática.

Cuidado si se rompe un LED

Ogunseitan agrega que si bien romper un solo LED y respirar sus humos probablemente no causarán cáncer, nuestros cuerpos casi no necesitan más sustancias tóxicas flotando alrededor, ya que los efectos combinados podrían ser un desencadenante de la enfermedad.

Si algún LED se rompe en casa, Ogunseitan recomienda barrerlo con guantes y una máscara, y eliminar los escombros (e incluso la escoba) como desechos peligrosos. Además, las cuadrillas enviadas para limpiar accidentes automovilísticos o semáforos rotos (los LED se utilizan ampliamente para la iluminación de automóviles y automóviles) deben usar ropa protectora y manipular el material como residuo peligroso. Actualmente, los LED no son considerados tóxicos por ley y pueden eliminarse en vertederos regulares.

Los estados aún tienen trabajo con los fabricantes de LEDS

De acuerdo con Ogunseitan, los fabricantes de LED podrían reducir fácilmente las concentraciones de metales pesados ​​en sus productos o incluso rediseñarlos con materiales verdaderamente más seguros, especialmente si los reguladores estatales o federales requerían que lo hicieran. “Todos los días no tenemos una ley que diga que no se puede reemplazar un producto inseguro con otro producto inseguro, estamos poniendo en riesgo la vida de las personas”, concluye. “Y es un riesgo evitable”.

Por supuesto, todos necesitamos algún tipo de iluminación en nuestras vidas y, a pesar de sus fallas, los LED pueden ser la mejor opción en cuanto a calidad de luz, uso de energía y huella ambiental. Dicho esto, los investigadores están ocupados trabajando incluso con las nuevas tecnologías de iluminación que podrían hacer que incluso las opciones ecológicas de hoy en día sean obsoletas.

¿El problema realmente es de los LEDS? NO

En este punto, no creo que haya muchos estudios sobre iluminación LED en particular, correctamente ejecutados y, por lo tanto, razonablemente confiables. Sin embargo, hay muchos estudios previos (una vez más correctamente ejecutados y, por lo tanto, razonablemente confiables) sobre la luz en un sentido más general, y algunas tecnologías LED implican el uso de compuestos peligrosos que podrían plantear problemas ambientales, pero eso es probablemente tangencial a esta discusión.

Por ejemplo, la exposición a la luz artificial en la noche puede tener efectos nocivos tanto en el comportamiento como en la fisiología humana y animal, y esto es independiente de la fuente de luz. (Los estudios sobre este tema de la era incandescente coincidieron en gran medida con los de la era fluorescente que coincidieron en gran medida con los de la era LED). La exposición intensa a la luz durante la noche puede interrumpir los ritmos circadianos, y esta ha sido casi siempre la regla. Además, la exposición a la luz azul intensa se ha relacionado con el daño ocular, y de nuevo esto no es necesariamente específico del LED, aunque los LED “blancos” basados ​​en fósforo son en realidad muyintensos de color azul.

Y, por supuesto, también hay otras cosas que considerar, como el deslumbramiento y la fatiga visual. Debido a que la iluminación LED tiende a ser intensamente “pico” desde una perspectiva de longitud de onda / color en lugar de ser una mezcla suave de colores como la luz incandescente o natural, es más áspera para los ojos. Demasiado puede inducir el deslumbramiento. A los ojos humanos tampoco les gusta la mezcla de colores basada en picos afilados de bandas de colores estrechas. Ambos conducen a la fatiga visual, y la fatiga visual conduce a su propio conjunto de problemas. (Esto también es un problema para la iluminación fluorescente, y por las mismas razones).

Para resumir, los LED pueden o no ser más o menos saludables que otras fuentes de luz, pero las mismas reglas se aplican a los LED como lo hace cualquier otra fuente de luz. El buen equilibrio de color, la atención a la intensidad, la idoneidad para una tarea determinada, etc., juegan un papel. Los LED están sujetos a la regla de “demasiado bueno” como otras fuentes de luz.